Dos personas que proporcionaban información a la Administración para el Control de Drogas de Estados Unidos (DEA) desde el cártel de Sinaloa fueron presuntamente asesinadas en México.
Esto, según información que recuperó el senador republicano Chuck Grassley.
Las personas desaparecidas eran identificadas como cooperadores y aceptaron dar información para obtener beneficios en sus procesos judiciales